Adoro la sensación del tacto de unos calcetines nada más despertarme, es lo único que puede conseguir que me levante de la cama además del aroma a café esperando en la mesa. Necesito la calidez del algodón para lograr salir de tan confortable lugar como es mi cama, además siempre me satisface ver esas pequeñas prendas maravillosas llenas de color, brillo y dibujos, encuentro adorable verlos sobre mis pequeños pies, siempre lograr sacarme una sonrisa para empezar bien el día.